El fallo Levinas
La transferencia de la justicia: un fallo que exige negociación y tensión
La Ciudad quiere la competencia, el procurador Casal en contra y Rosenkrantz en disidencia. Comienzo de año electoral y la anomalía de la Corte Suprema.
El fallo Levinas abrió viejas heridas en el Poder Judicial, entre quienes exigen la transferencia a la Ciudad y aquellos que la resisten. En una de sus últimas decisiones del 2024 la Corte Suprema por mayoría estableció que el Tribunal Superior de Justicia de la CABA es el superior tribunal de las causas que tramitan en la justicia Nacional. Fue al resolver una cuestión de competencia en un caso concreto, destacando la situación anómala donde aún coexisten la justicia local y la nacional con competencia ordinaria ( civil, comercial, laboral y penal) a pesar de la autonomía dispuesta en la Constitución Nacional, de la ciudad y los compromisos asumidos por las autoridades legislativas para traspasar las competencias judiciales. El fallo tuvo la disidencia de Carlos Rosenkrantz que sostuvo que lo decidido por sus pares supone un rediseño institucional de significativa trascendencia en el sistema federal argentino. Y aunque es transitorio, no existe en el ordenamiento “ la posibilidad de que un tribunal local revise decisiones de tribunales nacionales”.
Esta decisión puso en alerta a los magistrados que consideran que es inconstitucional y que se trata de un traspaso de hecho y harán lo posible para resistir. Por su parte el presidente del Colegio Público de la Abogacía, Ricardo Gil Lavedra en diciembre pasado manifestó que este cambio implicaba la necesidad de una mesa de trabajo para simplificar la tarea de los abogados. La primera señal en 2025 la dio el Procurador general interino Eduardo Casal que el viernes le pidió a la Corte la suspensión de la aplicación del Fallo al expresar que el Ministerio Público Fiscal se vería impedido de cumplir con sus funciones legales y constitucionales en los procesos que tramitan ante el fuero nacional, en detrimento de los intereses por los que tiene que velar. En consonancia con este pedido, la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la justicia Nacional harán el mismo reclamo.
En tanto se espera que esta semana comiencen los plenarios de los presidentes de las Cámaraa Nacionales para analizar los pasos a seguir. Mientras tanto durante la feria judicial se solicitaron dos cautelares para evitar la puesta en marcha del fuero laboral en la ciudad y en el marco de un expediente laboral de la Asociación de empleados fiscales e ingresos públicos contra el Poder Ejecutivo, la Cámara Nacional del Trabajo de feria rechazó un planteo del Estado Nacional para remitir un expediente al Tribunal Superior porteño al sostener que si está demandado un órgano federal, el caso no puede estar decidido por un Tribunal local.
Todo lo que se está gestando, no fue bien recibido por la Ciudad de Buenos Aires que desde hace muchos años exige la transferencia de la justicia a su órbita y que el fallo de la Corte se cumpla. Este fin de semana el Ministro de justicia de CABA, Gabino Tapia salió con los tapones de punta y expresó en redes sociales “Los fallos están para cumplirse. La Corte Suprema fue clara y contundente: terminemos de una vez con el “inmovilismo” y avancemos con las transferencias pendientes para concretar una autonomía plena de la Ciudad de Buenos Aires, tal como lo dispone la Constitución Nacional”.
Además desde el Ejecutivo porteño defendieron la puesta en funcionamiento del fuero laboral aprobado en la legislatura para acelerar los procesos que en la justicia nacional “tardan cinco u ocho años”. Aseguran mantener un canal de diálogo con Nación para que se realice el traspaso de la justicia nacional ordinaria al Poder Judicial de la Ciudad. El año judicial recién comienza pero esta pelea que lleva años no será sencilla de resolver, los jueces nacionales creen que van a perder privilegios y nadie está dispuesto a ceder.