Comienzo de año sangriento en la Provincia de Buenos Aires: Oleada de homicidios y el silencio del gobernador

     El final de 2024 presagiaba lo que ocurriría durante el comienzo de este año. La mecha de la indignación social se encendió con el crimen de Camila Elena Rocha (24) en Ingeniero Budge, cuando dos delincuentes le dispararon en el pecho mientras intentaban robarle la riñonera, y aumentó con el homicidio a puñaladas de Lucas Aguilar (20) en Moreno, un repartidor asesinado tras defender a un vendedor ambulante. 

     Pero este fin de semana la ira de toda la sociedad explotó con el asesinato de dos adolescentes en Florencio Varela. Los jóvenes eran buscados intensamente desde el 30 de enero, cuyos cuerpos sin vida aparecieron en un descampado.

     El desgarrador hecho comenzó el 30 de enero, cuando Josué Salvatierra, de 14 años y su amiga y novia desde hacia unos meses, Paloma Gallardo, de 16,  salieron de sus casas avisándoles a sus padres que irían al gimnasio juntos. Al llegar la noche y  preocupados cuando notaron que los adolescentes no habían vuelto a sus casas, los padres de las víctimas  denunciaron la desaparición de los menores  La búsqueda que inició con los padres de los jóvenes concluyó ayer, cuando los hallaron muertos en un descampado cerca del puente de Bosques, que se encuentra cerca de las casas de las víctimas y a siete cuadras del gimnasio a donde supuestamente se dirigían. Todo indica que el doble crimen fue en ocasión de robo, ya que ni Paloma ni Josué tenían sus celulares y sus mochilas entre sus pertenencias. 

     Lo más escalofriante es el modo que utilizaron el o los delincuentes para asesinarlos: Fueron golpeados de forma brutal y  repetidamente con un objeto contundete en la cabeza. En la escena del crimen, los peritos notaron la presencia de “una piedra tipo asfáltica bastante pesada, manchada con sangre“.  

     Los padres de Paloma, Alicia Pita y Oscar Gallardo re refirieron  sobre el crimen durante un streaming donde la madre declaró que  los adolescentes “fueron víctimas de la delincuencia inmunda” y añadió: “Le arrebataron la vida injustamente a dos jovencitos que tenían toda la vida por delante”. Concluyó, notablemente quebrada: “Estamos atravesando por el valle de sombra y de muerte, inesperadamente. Jamás pensamos que íbamos a pasar por una situación como esta”. 

     Entre tanto, las teorías e hipótesis que se barajan son variadas, algunos dicen que el destino real era el lugar donde finalmente los encontraron y que solían frecuentar, pero que a sus padres les habrían dado la excusa de que irían al gimnasio para poder pasar tiempo a solas. Poco importan estas conjeturas. Paloma y Josué fueron salvajemente asesinados por, lo que se sospecha hasta el momento, al menos dos delincuentes despiadados. 

     Ayer, Patricia Bulrich cruzó ferozmente al gobernador Kicillof en  la red X y disparó: “Kicillof, concentrate. Los jóvenes de la Provincia sufren el abandono y vos te enfrascas en luchas ideológicas mientras ellos siguen padeciendo (…) Ayer saliste a la calle a defender “derechos“ mientras los derechos más básicos, como el derecho a la vida, están a la deriva en la provincia. Paloma y Josué fueron encontrados muertos este sábado, a la misma hora en que vos estabas en las calles porteñas  protestando contra el gobierno. Tantas vidas sacrificadas a tu desidia. Con nosotros, el que las hace, las paga. Sea delincuente o gobernador.“ Kicillof, por su parte, se mantuvo en silencio y no brindó ningún tipo de comentario sobre el atroz crimen ni tampoco, en un gesto que al menos disfrazaría un atisbo de humanidad, les dio el pésame a los padres de los adolescentes muertos.