Empresas
Febrero, época de concursos
Febrero es época de vendimia y carnaval, tiempo de festejo, sorteos, bailes y como corresponde concursos, pero este febrero en particular trae concursos más amargos, porque los números fueron esquivos para algunas empresas del sector agroindustrial y terminaron empujando a presentar el concurso preventivo de acreedores a cuatro de ellas. ¿Cuánto daño le hace esto al campo? Que pregunta retórica ¿Qué sería el campo? ¿Las empresas del mismo rubro? ¿Los mercados? ¿El productor?
El productor agropecuario está sentado en la galería y mira al oeste esperando el agua, le dicen que la cosa está complicada, porque SANCOR, LOS GROBO Agropecuaria, AGROFINA y SURCOS presentaron el concurso preventivo de acreedores, y el tipo piensa… “Si sube el valor del grano, me aflojan la cincha impositiva y las retenciones y se digna a caer una decente cantidad de agua acá la cosa cambia por todos lados".
La verdad es que esta noticia, no tan sorprendente, del llamado a concurso preventivo de acreedores por parte de estas firmas poco le hace al productor de manera directa, salvo honrosas excepciones. Es necesario separar los casos para entenderlo con mas detenimiento. Estamos ante un grupo con dos empresas, una que solo es proveedor de insumos (AGROFINA) y otra empresa, LOS GROBO Agropecuaria que entre otras cosas es acopiador de gran volumen, hectáreas de siembra, molinos, etc. que interactúa mucho más con productores directamente. Por otro lado SURCOS es otro proveedor de insumos y por último una empresa láctea que lleva muchísimo más tiempo complicada que el resto.
Primero hablemos sobre que tienen en común estos casos. Lo que cuanto menos es interesante de remarcar para el lector es que todos presentan su convocatoria el primer día hábil del mes de febrero y no porque pongan sus acciones en manos de la virgen de la candelaria a quien se la recuerda el 2 de este mes, sino porque aprovechan la feria judicial del mes de enero para organizar deudas contra activos y después ver como enfrentan la tormenta.
Dejemos un poco de lado el caso Sancor. Los Grobo Agropecuaria, Agrofina y Surcos comenzaron a fines del año pasado su derrotero que desembocó en este momento. Habiendo emitido deuda pública no pudieron enfrentar los pagos y terminaron en esta situación que hace ruido al sector agroindustrial. Pero cada caso es distinto a la vez.
SURCOS tiene 61 cheques rechazados por más de $ 600 millones, en los últimos días realizó despidos de personal y el Directorio de la empresa decidió hacer la presentación de la sociedad en concurso preventivo porque de este modo presumen que lograran la sustentabilidad de la deuda en la que se ha incurrido y así continuar con las operaciones. El caso de SURCOS hace algo de ruido porque apenas unos días después de haber efectuado una refinanciación de deuda muy grande presenta este concurso preventivo y genera reclamos por parte de los damnificados que miran de reojo esta operación.
Pero el daño aquí no toca al campo, es decir no perjudica al productor, al menos no al productor en su función primaria. Si perjudica a aquellos que compraron obligaciones negociables de la empresa y a los que seguramente se les hará difícil recuperar lo invertido, pero al productor que está mirando el horizonte esperando el agua, a ese no le hace mella. En el mejor de los casos ese gaucho le compró insumos a crédito y él le debe a Surcos, pero no al revés.
Otra historia es el caso de LOS GROBO Agropecuaria y Agrofina, ambas empresas del grupo LOS GROBO. En estos casos las deudas que alcanzaron las empresas son mas grandes. Hay más de $10.700 millones entre pagarés bursátiles y descuentos de valores, sumados a una gran deuda asumida con bancos y $ 2.500 millones en cheques rechazados por parte de LOS GROBO.
Agrofina por su parte también cuenta con una deuda importante, mas de $9.000 millones de pagarés bursátiles y descuentos de valores de diciembre y enero sumado a otros con vencimiento en el primer trimestre, deuda con bancos con riesgo de insolvencia y más de $2.500 millones de cheques rechazados. El caso de Agrofina para con el productor es similar al de Surcos. Pero no así el de LOS GROBO Agropecuaria.
En el caso de la compañía de Carlos Casares hay un impacto sobre algunos productores, que les confiaron sus granos ya sea haciendo acopio o invirtiendo en sus hectáreas sembradas. Muchos han tenido la posibilidad de retirar insumos por sus granos, algo poco usual en la previa a un concurso preventivo, pero lo pudieron hacer y de este modo la empresa pagó al menos en parte deuda para con los productores.
Aunque el caso de LOS GROBO, AGROFINA y SURCOS son distintos en muchos aspectos tienen relación directa con una situación general del sector, la baja del valor de los comodities, los distribuidores que están sobre comprados, una fuerte presión impositiva y el valor del dólar planchado complican la situación. Incluso algunas voces desde LOS GROBO comentaron que todo esto ocurrió porque esperaban que el dólar para este momento estuviera por sobre los $3000. La situación de todas las empresas del sector en el 2024 fue complicada, pero gran parte de estas compañías se acomodaron para enfrentar la ola, no la pasaron bien, y varias siguen braceando. Pero nada tiene que ver la situación de estas tres con el caso Sancor.
La cooperativa láctea que viene hace muchos años arrastrando complicaciones terminó de presentar su concurso preventivo el primer día hábil de febrero porque alcanza un pasivo de 250 millones de dólares. La confianza en la empresa se fue resquebrajando con los años y sumado a la falta de materia prima, la reducción de personal, los problemas gremiales que trajo esta reducción, la falta de capacidad para conseguir inversores y la acumulación de deudas dejaron a Sancor es esta situación.
Recapitulemos, al productor le puede pegar algo la situación de LOS GROBO y de SANCOR si por el caso se trata de un tambo que trabaja con la alimenticia. A las empresas vinculadas con agro insumos la situación de sus pares tal vez podría exponerlas y hacer que los inversores sean mas finos a la hora de invertir. A los mercados les será útil entender como funcionan estas empresas y cuales son los ruidos que las pueden complicar.
Ahora, al campo… al campo le hace falta lluvia de la que empezó a caer.